Nerviosismo en la derecha por las consultas populares «Monarquía o República»

La nueva derecha de Casado, Rivera y Abascal se solivianta ante la proliferación de referéndums populares y de iniciativas de instituciones públicas en favor de la República y de la abolición de la Monarquía.
El escoramiento hacia la extrema derecha que están experimentando Ciudadanos y el Partido Popular se ve reflejado en el nerviosismo que están demostrando algunos de estos partidos por las consultas populares no vinculantes en las que se pregunta al pueblo «Monarquía o República». Lo hemos visto con la reacción que tuvieron con las mociones aprobadas por el Parlament de Catalunya, el Ayuntamiento de Barcelona o de Pamplona que pedían la abolición de la Monarquía.
El último ejemplo de este nerviosismo se ha dado en la ciudad madrileña de Leganés donde el próximo 2 de diciembre, junto a los distritos de Latina, Arganzuela, Carabanchel, Centro, Tetuán, Vallecas, Usera y Orcasitas y las localidades de Alcobendas, San Sebastián de los Reyes, Parla y Rivas, se va a celebrar un referéndum popular no vinculante en el que se preguntará a los y las leganenses sobre «Monarquía y República». A todo esto hay que sumar las diferentes consultas convocadas en distintas universidades y localidades de toda España. El movimiento republicano no para de crecer y desde los sectores reacios a cualquier reforma de los esquemas planteados en 1.978 y que, a la luz de los acontecimientos, se demuestran desfasados.
El Partido Popular de Leganés ha pedido explicaciones al alcalde, el socialista Santiago Llorente —quien ha declarado que si se celebrara un referéndum legal sobre esta cuestión él votaría en favor de la República—, sobre la cesión de espacios públicos para emitir documentales en contra de la Monarquía o que se permita que en diferentes puntos de la ciudad haya mesas informativas que promocionan la consulta porque se pone en entredicho el ordenamiento jurídico español, algo que no pensaron cuando los populares pedían firmas para la no derogación de la antidemocrática prisión permanente revisable o el boicot a los productos catalanes, por citar algunas de las iniciativas puestas en marcha por los conservadores en los últimos tiempos. Además, han amenazado con denunciar al alcalde si permite la celebración del referéndum, según ha informado el diario digital Leganews.
Por su parte, los organizadores de la consulta, a pesar de las amenazas del Partido Popular, colocarán las urnas en la calle el próximo día 2 de diciembre.

Estudiantes contra los Borbones, una historia de lucha e inconformismo

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OPINIÓN

Estudiantes contra los Borbones, una historia de lucha e inconformismo

La protesta estudiantil ha tenido un papel protagonista en buena parte de la historia española, especialmente en los momentos de agitación revolucionaria, cuestionando y enfrentándose a la Corona. Hoy, las iniciativas en las universidades para llevar adelante un referéndum sobre la monarquía atestiguan, precisamente, ese papel protagonista.

Son ya al menos once, porque se están sumando nuevas constantemente, las universidades del Estado español que están impulsando referéndums sobre la monarquía. Desde la Autónoma de Madrid, la Universidad de Zaragoza, las de Barcelona y la Pompeu Fabra, la Carlos III, la Complutense y la Politécnica de Madrid, también la UNIAS de Asturias, la UVigo en Galicia, la Universidad de La Laguna en Tenerife y la Universidad de León. Iniciativas que desde luego están empalmando con un sentimiento presente en una juventud que está cansada de la precariedad laboral, de los recortes en la educación y servicios sociales, del sistema judicial, de la corrupción o de los ataques a las libertades políticas y de expresión.

La Monarquía es una de las instituciones centrales de este Régimen. Vinculada con la corrupción, con negocios sucios, con la represión a las libertades democráticas y, sobre todo, con el franquismo, del que es heredera. En un marco en el que la juventud percibe que la sociedad no le ofrece ningún futuro más que sobrevivir con trabajos precarios y vivir peor que sus padres, la casa real, con sus sueldos millonarios, sus galas y “besamanos”, es vista cada vez más como una institución antidemocrática, reaccionaria y anacrónica que está en la cima de quienes quieren perpetuar este estado de cosas. Es por ello que el movimiento antimonárquico entre las y los estudiantes universitarios se extiende como reguero de pólvora y va camino de convertirse en un movimiento estatal junto al resto de las consultas en barrios y municipios.

Esto está ocurriendo ahora, pero no es un fenómeno nuevo. El movimiento estudiantil se ha caracterizado por este cuestionamiento y enfrentamiento a los Borbones desde sus orígenes hasta épocas posteriores.

Si nos retrotraemos al siglo XIX –cuando la universidad era muy diferente a la actual y un privilegio casi absoluto de las elites–, ya observamos hechos históricos como la “Noche de San Daniel” del 10 de abril de 1865. El origen de esta protesta estudiantil estuvo en la prohibición ministerial de expresar ideas contrarias a la monarquía y al Concordato firmado con la Iglesia católica en 1851 y, tras tres días de alborotos, dos mil manifestantes se enfrentaron a la Guardia Civil Veterana en la Puerta del Sol de Madrid, con un saldo de 14 muertos, 74 heridos y 114. Este suceso juvenil sería el anticipo de movilizaciones revolucionarias más serias, como la rebelión del Cuartel de San Gil, el 22 de junio de 1866, contra la reina borbónica Isabel II, apoyada por el partido progresista y el democrático con la intención de echar abajo la monarquía. Durante estos sucesos grupos de estudiantes apoyaron a los militares rebeldes saliendo a la calle y formando barricadas.

Pero si nos vamos al siglo XX, también podemos encontrar distintos momentos históricos fundamentales. En los años 20, el movimiento estudiantil se enfrentó a la dictadura de Primo de Rivera y fue convergiendo con corrientes radical-democráticas, republicanas y socialistas, llevando a cabo una lucha que haría entrar en crisis a este régimen y a la propia Monarquía, que lo había apoyado, desembocando en el inicio de la revolución y el advenimiento de la Segunda República.

Del mismo modo, en los años sesenta y setenta, el movimiento estudiantil estuvo a la cabeza, junto al movimiento obrero, en el enfrentamiento a la dictadura franquista y contra el rey borbónico elegido por el propio Franco, Juan Carlos I, padre del actual monarca y todavía rey emérito. Una juventud de estudiantes, obreras y obreros, que tomaban las facultades y universidades, las fábricas y las calles, jugándose su propia vida, llevando en el corazón la esperanza y la convicción de que un mundo distinto era posible.

Hoy, en 2018, cuarenta años después de la Constitución de 1978, el sentimiento antimonárquico vuelve a florecer entre las y los estudiantes. Aún se encuentra lejos de aquellas grandes gestas revolucionarias que mencionamos. Pero se enmarca en la tradición y experiencia histórica de una juventud y un movimiento estudiantil combativo, rebelde, contestatario y revolucionario.

Las y los estudiantes que hoy impulsan referéndums sobre la monarquía en todo el Estado reivindican su derecho a cuestionar y decidirlo todo, a abolir la monarquía y abrir procesos constituyentes en todo el Estado. Un órdago brutalmente inconformista, que se corresponde con la propia naturaleza de la juventud, por más que los agoreros de siempre digan que las y los jóvenes son unos “pasotas” a los que no interesa nada más que irse de fiesta.

No, la juventud ya no se conforma, quiere dar batalla por su futuro y los referéndums en las universidades son una muestra de esto. Un primer paso que, de desarrollarse, puede abrir el camino al surgimiento de un nuevo movimiento estudiantil. Una juventud combativa que, si busca unirse a las trabajadoras y trabajadores, al movimiento de mujeres, a la lucha de los pensionistas y el resto de los sectores populares, puede hacer, una vez más, que la tortilla se vuelva.

Fuente: Izquierda Diario

Ya son nueve las universidades que organizan un referéndum sobre la monarquía

CONSULTAS REPÚBLICANAS
Ya son nueve las universidades que organizan un referéndum sobre la monarquía

Siguiendo el ejemplo de la Autónoma de Madrid, la Universidad de Zaragoza, las de Barcelona y la Pompeu Fabra, la Carlos III, la Complutense y la Politécnica de Madrid, y también la UNIAS de Asturias y la UVigo en Galicia organizan un referéndum sobre la monarquía.

El movimiento antimonárquico entre las y los estudiantes universitarios se extiende como reguero de pólvora y va camino a convertirse en un movimiento estatal junto al resto de las consultas en barrios y municipios.

“Lo que arrancó como una idea quizá algo grandilocuente de una decena de estudiantes sentados en círculo en un césped de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) lleva camino de convertirse en un movimiento estudiantil a nivel nacional”. Así comienza una nota publicada este viernes en ElDiario.es, una de las decenas de artículos de prensa dando cuenta del impacto que en pocas semanas ha adquirido la convocatoria de la Plataforma Referéndum UAM, que el próximo 29-N hará su referéndum sobre la monarquía en la universidad madrileña. Y no es una exageración.

Desde el referéndum por la independencia de Catalunya el 1-O de 2017, que implicaba la ruptura abierta con el régimen español y su monarquía, seguido por los abucheos a Felipe VI en agosto del año pasado en Barcelona, las muestras de rechazo a la casa real se tornaron cada vez mayores y frecuentes. Y, sobre todo, no han dejado de multiplicarse en pequeñas y grandes manifestaciones.

Es un hecho que cada vez más sectores de la clase trabajadora y la juventud se plantean por qué se debe seguir manteniendo una institución reaccionaria heredada del franquismo, totalmente arcaica y antidemocrática. Sin comprender este fenómeno profundo de desafección con la monarquía, reflejado además en múltiples encuestas, no es posible explicar la dinámica actual, de la que justo ahora estamos viendo sus primeras expresiones.

El pasado 23 de junio en el madrileño barrio de Vallecas 6.490 personas (de 7.270) dijeron ’sí’ a la República en la consulta organizada por la plataforma Vallekas Decide. El parón veraniego limitó inicialmente su expansión. Pero, aunque insospechado en ese momento, esta iniciativa estaba en la génesis de lo que hoy comienza a mostrarse como un movimiento cada vez más amplio.

Vicálvaro el 24 de noviembre; Latina, Arganzuela, Carabanchel, Centro, Tetuán, Vallecas, Usera, Leganés, Alcobendas, San Sebastián de los Reyes, Parla y Rivas el 2 de diciembre; Laguna y Móstoles el 15 de diciembre. Mas de una docena de distritos y municipios harán consultas sobre la monarquía en poco menos de un mes.

En este marco aparece la convocatoria estudiantil a realizar un referéndum en la UAM, una iniciativa pionera en las altas casas de estudio que en poco tiempo ha comenzado a ganar simpatía y a extenderse a otras universidades.

“Extensión universitaria” contra la monarquía
Pocos días después del lanzamiento de la iniciativa de la UAM, estudiantes de la Universidad de Zaragoza pusieron en pie la plataforma Referéndum UNIZAR. En una asamblea el próximo 13 de noviembre decidirán la fecha en que realizarán el referéndum.

Del mismo modo que sus compañeras y compañeros madrileños, también esperan que esta iniciativa “siga abonando el camino para que se puedan abrir procesos constituyentes libres y soberanos en los que podamos decidirlo todo, desde la forma de Estado, hasta el derecho autodeterminación de los pueblos, como también cuestiones que hacen a nuestro futuro y sobre las que no quieren que nos pronunciemos, como el pago de la deuda, el paro, la sanidad o la educación, entre tantos otros”, asegura Lorien Matute, impulsor de la plataforma e integrante de la agrupación juvenil Contracorriente.

Poco después llegó el turno de la Universidad Carlos III de Madrid, donde estudiantes y profesores también se han unido a la iniciativa de la Autónoma. El 4 de diciembre es la fecha elegida para convocar un referéndum en la universidad cuyo campus se encuentra en Getafe.

“El modelo de estado es una cuestión sobre la que la ciudadanía tiene que hablar, y la cual nunca se ha planteado desde 1978 (…). Consideramos que la Universidad es un lugar de formación de conocimiento crítico, por ello, poniendo en práctica nuestra voluntad de crear y fomentar un debate público y una acción popular, promovemos la realización de una consulta sobre el modelo de estado”, argumentan desde la plataforma Referéndum UC3M.

Desde este miércoles, también estudiantes de la Universidad de Barcelona (UP) y la Pompeu Fabra (UPF). Constituida inicialmente para dar apoyo al referéndum convocado por estudiantes de la Universidad Autónoma de Madrid y otros barrios de la capital, la plataforma “Fora el Borbó” decidió este miércoles en su primera asamblea sumarse a la iniciativa y hacer un referéndum en ambas universidades, también el 4 de diciembre.

En la asamblea se resaltó la importancia de hablar de procesos constituyentes en plural, dejando claro que se trata de que también Catalunya pueda realizar el suyo propio como un libre ejercicio de autodeterminación y en el mismo sentido en que se votó el 1 de octubre, tal y como argumentaba Pablo, estudiante de economía, política y filosofía en la UPF. Así, el movimiento de los referéndums en las universidades permite pensar en una lucha conjunta en todo el Estado contra la monarquía y el Régimen del 78.

También los estudiantes de la Universidad Complutense y la Politécnica de Madrid informaban la creación de la plataforma Referéndum UCM-UPM, sumándose al movimiento para convocar un referéndum en sus universidades durante el mes de diciembre. En una próxima asamblea decidirán la fecha definitiva.

Y en el norte, estudiantes de Galiza y Asturies han sido los ultimos en sumarse al movimiento.

Este es sólo el comienzo. “Se están sumando muchas otras universidades, desde Valencia a Galiza y Andalucía, porque también quieren organizar el referéndum”, dice Lucía Nistal, portavoz de la plataforma Referéndum UAM y una de las precursoras del movimiento.

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El debate acerca de la monarquía y sobre el carácter antidemocrático del régimen de conjunto se ha instalado de tal modo en las universidades que decenas de docentes, investigadores y personal administrativo de universidades de todo el Estado han firmado un comunicado de apoyo a las iniciativas animando “a participar en la misma a toda la comunidad universitaria (estudiantes, profesorado y PAS)”.

“Frente al silencio o apoyo explícito a la corona de las autoridades universitarias”, los y las firmantes del texto de apoyo “expresan la voluntad de que la universidad sea un espacio crítico y democrático”.

Un cuestionamiento radical al régimen político
“En redes sociales nos llaman analfabetos, ninis, porretas, varios me han mandado a vendimiar, y el mejor comentario es que somos unos pandilleros de musical de Broadway de clase B… -se ríe-. ¿Quiénes somos realmente? Somos estudiantes e investigadores de la Autónoma y tenemos un objetivo común, que es derrocar a esta monarquía heredada del régimen franquista”, decía Marcos, estudiante de historia de primer año, la asamblea de la UAM que puso fecha al referéndum del próximo 29-N.

Las y los estudiantes se ubican así a la vanguardia del cuestionamiento del conjunto del régimen político. Un régimen “blindado, que se niega a que se pueda cuestionar esta institución y todas las herencias de una Transición impuesta a todos aquellos que no pudimos votar la Constitución del 78”, explican.

Nistal refuerza ese argumento: “Se trata de una monarquía impuesta, que nunca se votó, como reconoció hasta el propio expresidente Suárez –poco sospechoso de izquierdista–, que metieron por la ventana en el pack de la constitución que se votaba bajo el chantaje de que era la única vía para la democracia. Una constitución en cuya redacción participaron militares del franquismo para imponer la indisoluble unidad de España y que hoy está cerrada con candado, cuya llave la tiene el rey y su derecho a veto”.

Vivir en este régimen heredado del franquismo es un “absurdo evidente” para los estudiantes, la mayoría de ellos menores de 25 años. “¿Por qué las nuevas generaciones debemos pagar el precio de una institucionalidad inmutable consagrada en un tiempo, un espacio y una situación política que no vivimos y sobre la que no pudimos tener opinión?”, se preguntan.

Por ello en los referéndums de algunas universidad ya se ha votado que habrá dos preguntas: “¿Estás a favor de abolir la Monarquía como forma de Estado e instaurar una República?” será la primera pregunta. Y la segunda: “En caso afirmativo, ¿estás a favor de la apertura de procesos constituyentes para decidir qué tipo de República?”.

Fuente: Izquierda Diario